sábado, 13 de marzo de 2010

Este mundo de consumo nos muestra como un objeto utilizable”
Día de la mujer


Lo dijo la subsecretaria de Mujer y Familia, Marcela Isarra al reflexionar sobre la mujer de hoy. Aseguró que uno de los problemas más graves es la violencia de género y que cada vez más mujeres se animan a denunciar. Al cierre alentó a las mujeres para que participen en las organizaciones de la sociedad.

El pasado lunes 8 de marzo se celebró el Día Internacional de la Mujer, una fecha que fue designada en el almanaque para conmemorar a un grupo de mujeres trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York que murieron calcinadas mientras reclamaban por sus derechos. Este día ha sido aceptado por las Naciones Unidas y es una fecha clave para reflexionar acerca de la situación de las mujeres en el mundo y las problemáticas que le son propias. En Argentina la Violencia de Género es una de las cuestiones que preocupan y cuyos números van en aumento. El año pasado 231 fueron las mujeres muertas en nuestro país a manos de sus parejas o ex parejas, esto significa que cada día y medio una mujer murió por femicidio, y en lo que va de este año 30 son las mujeres muertas.

Violencia familiar
EL NORTE dialogó con la subsecretaria de Mujer y Familia, Marcela Isarra quien aseguró que en Ramallo también va en aumento el número de casos de víctimas de violencia familiar. “Siguen aumentando los casos y es algo que nos preocupa. En el primer bimestre del año, si bien no lo tenemos cuantificado, ha aumentado considerablemente el número de casos. Pero esto también se debe a otros factores, creemos que lo que hemos desarrollado el año pasado con el trabajo de concientización y el aporte invalorable de los medios de comunicación que nos permiten hablar y trasmitir todo, con ese trabajo hemos logrado que más mujeres se animen a denunciar, que la comunidad tome conciencia que la violencia es cada vez mayor y si bien es cierto que la violencia intrafamiliar siempre existió, estamos generando espacios que permiten que tal situación se pueda denunciar y dónde pedir ayuda”.

Aumentan las denuncias
El aumento de las denuncias es una tendencia que se da también en el resto del país. Según datos de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia, el número de denuncias creció un 42,9 por ciento en relación al año pasado. Mientras que en enero de 2009 recibieron 375 denuncias, en el mismo mes de este año fueron 526 las denuncias registradas.
“Permanentemente recibimos pedidos de ayuda y con casos que no nos dejan de asombrar por la perversidad, el daño y el castigo, no sólo físico sino psicológico que se está ejerciendo. Hay casos que creíamos que jamás íbamos a ver, hay casos en los que hace muchísimo estamos trabajando y nos asombra la perversidad de los varones en algunos hechos, nos preocupa, no nos asusta, pero nos preocupa y nos estamos ocupando” aseguró la funcionaria municipal.

¿Cómo responde la Justicia argentina ante estos hechos?
-No es fácil, por eso es que el próximo jueves estaremos brindando una capacitación al personal policial puesto que muchas veces no se sabe qué hacer con una denuncia de este tipo. Por ejemplo, si va una mujer a la Comisaría y dice que su marido le pega, se le constatan los golpes y se hace la denuncia.
En cambio, si va otra mujer y dice que el marido la insulta, le tira la comida pero no le pega, no se sabe qué hacer. Aunque no haya golpes, en ese caso hay una tortura psicológica y esa denuncia tiene que ser tomada porque la ley ampara a la mujer en ese caso también. Tenemos una ley provincial y nacional, programas nacionales y provinciales y dos juezas de la Corte Suprema de Justicia que están sumamente comprometidas en la materia y han creado un área específica para trabajar el tema de la violencia, pero en la práctica es muy difícil trabajarlo desde la justicia.

Acceso al trabajo e igualdad
Muchos otros son los problemas a los que la mujer argentina se enfrenta a diario. El acceso al trabajo, a la educación o al sistema de salud, son sólo algunos de ellos. “Es muy difícil conseguir trabajo en cualquier lugar del país, la situación no está fácil, mucho menos en Ramallo. Es muy difícil por ejemplo ubicar a una mujer en Parque Comirsa aunque destacamos la gestión que está haciendo Darío Parlacino dentro del Parque, no es fácil ubicar a las mujeres para ese tipo de trabajos. Laboralmente hoy vemos que las mujeres son docentes, trabajan en casas de familias o en la administración pública, en los trabajos más tradicionales. En este tema rescato la opinión de Eva Giberti quien dice que existe el estereotipo de que somos utilizables, como marcan esas publicidades en TV que anuncian “mande amor al 2202”. Nuestros hijos se están criando con esas imágenes y con la idea de que somos un elemento utilizable o que somos las eternas constipadas y que un yogur especial nos resuelve ese problema. Seguimos sin encontrar ese lugar que nos debemos dar, y más allá de que algunos tengan o no diferencias con la Presidenta de la Nación, yo sigo rescatando que es una mujer que accedió al cargo que cualquier militante política le gustaría llegar. El ingreso de las mujeres al mundo de la política es muy difícil, más allá de la ley de cupo, vemos el Concejo Deliberante donde no se cubre el cupo femenino, más allá de que en las listas estaban las mujeres. Es por eso que tenemos que seguir trabajando en ese sentido porque falta participación y compromiso. Entiendo también que nuestra vida familiar hace que no podamos hacerlo porque más allá de nuestra militancia o trabajo, después volvemos a casa y tenemos que ser mamás, esposas, amas de casa y se complica mucho nuestra salida afuera. De cualquier manera yo aliento a las mujeres a que salgamos a la calle, a participar ya sea en la comisión de un club, o donde sea porque la mirada de la mujer, en cualquier espacio de participación, es distinta y mucho más positiva a veces que la que puede aportar un varón”.

Cambios culturales
Tal como explicó la funcionaria, para que la mujer pueda seguir ganando espacios y accediendo a lugares que aún son exclusivos del hombre, serán necesarios cambios culturales y fundamentalmente el acompañamiento del sexo masculino para que esos cambios se puedan dar.
“Lamentablemente los varones no son de acompañarnos mucho, el acompañamiento del varón no es el mismo que nosotras le damos a ellos. Cantidad de mujeres que trabajan todo el día regresan a su casa y no encuentran ningún acompañamiento, porque acompañar no sólo implica que el hombre apoye lo que hacemos, significa cambios hacia adentro del hogar esto es lavar platos, preparar los chicos para la escuela o cocinar. Estos son cambios culturales que se tienen que dar y que nos llevarán mucho tiempo, no creo que los llegue a ver y no sé si lo verán mis hijos. Este mundo capitalista y de consumo nos sigue mostrando como un objeto utilizable y no como lo que somos, verdaderas mujeres, que tenemos mucho para dar y que valemos mucho.”


Autora: Estefania Correa. fuente: Diario El Norte